Se puede despedir despues de un erte

El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) ha sido una medida adoptada por muchas empresas durante la pandemia del COVID-19 para hacer frente a la crisis económica y mantener su viabilidad. Sin embargo, una vez que finaliza la situación excepcional que lo justificó, las empresas pueden plantearse la posibilidad de despedir a sus trabajadores. ¿Es esto posible? ¿Qué requisitos deben cumplirse? En este artículo, vamos a analizar la situación actual y las posibilidades que tienen las empresas de despedir después de un ERTE.

¿Te despidieron después de un ERTE? Descubre qué hacer en esta situación

El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) es una medida que se ha utilizado en muchas empresas para hacer frente a la crisis económica provocada por la pandemia. Esta herramienta permite a las empresas suspender temporalmente los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados. Sin embargo, ¿qué ocurre si después de un ERTE te despiden?

En primer lugar, es importante saber que sí, se puede despedir después de un ERTE. Esto se debe a que el ERTE es una medida temporal y no garantiza la estabilidad laboral de los trabajadores. Por tanto, si la empresa atraviesa dificultades económicas y no puede mantener a toda su plantilla, puede tomar la decisión de despedir a algunos trabajadores.

Sin embargo, es importante que la empresa justifique el despido, ya que si no lo hace, podría ser considerado un despido improcedente y el trabajador tendría derecho a una indemnización. Además, si la empresa ha recibido ayudas públicas para hacer frente al ERTE, deberá cumplir una serie de requisitos y compromisos, como la prohibición de despedir a los trabajadores afectados por el ERTE durante un determinado periodo de tiempo.

Si te han despedido después de un ERTE, lo primero que debes hacer es comprobar si la empresa ha cumplido con todos los requisitos legales. Para ello, puedes consultar con un abogado laboralista o con los servicios de información y asesoramiento que ofrecen los sindicatos.

Si la empresa ha cumplido con todos los requisitos legales, deberás solicitar la correspondiente indemnización por despido. Si consideras que el despido no ha sido justificado, podrás impugnarlo y reclamar una indemnización mayor.

Por último, es importante que sepas que existen medidas de protección para los trabajadores afectados por un ERTE. Por ejemplo, si eres despedido después de un ERTE y no encuentras trabajo en un plazo determinado, podrás solicitar la prestación por desempleo correspondiente al periodo de suspensión del contrato.

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Si es así, solicita la correspondiente indemnización por despido. Si consideras que el despido no ha sido justificado, podrás impugnarlo y reclamar una indemnización mayor. Y recuerda que existen medidas de protección para los trabajadores afectados por un ERTE.

ERTE y compensación por despido: ¿Cómo se ven afectados tus derechos laborales?

El ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) es una medida que permite a las empresas suspender temporalmente los contratos de trabajo de sus empleados debido a causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. Esta medida ha sido utilizada ampliamente durante la pandemia para evitar despidos masivos.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que un ERTE no implica el fin del contrato de trabajo, sino una suspensión temporal en la que el empleado no trabaja, pero sigue manteniendo su relación laboral con la empresa. Durante este tiempo, el trabajador tiene derecho a recibir una prestación por desempleo por parte del Estado.

En algunos casos, la empresa puede decidir despedir a algunos de los trabajadores afectados por el ERTE. En este caso, el trabajador afectado tendría derecho a recibir una compensación por despido, que dependerá de la antigüedad y el salario del trabajador, así como de las causas del despido.

Es importante tener en cuenta que, en caso de un despido tras un ERTE, el trabajador tendría derecho a una indemnización por despido improcedente si se considera que el despido ha sido injustificado. En este caso, la empresa tendría que pagar una cantidad que puede llegar hasta los 33 días por año trabajado.

Otro aspecto importante a tener en cuenta es que, si el trabajador ha estado en un ERTE, la empresa tiene la obligación de ofrecerle su puesto de trabajo de vuelta una vez finalice el período de suspensión. Si la empresa no cumple con esta obligación y decide despedir al trabajador, este tendría derecho a una indemnización por despido improcedente.

Calcula tu indemnización tras un ERTE: guía completa y actualizada

En el contexto actual de la pandemia, muchas empresas han tenido que recurrir a los ERTEs (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo) como medida para hacer frente a la crisis económica. Sin embargo, ¿qué pasa después de un ERTE? ¿Puede una empresa despedir a un trabajador?

La respuesta es sí, pero con ciertas condiciones. Según la normativa, una empresa puede despedir a un trabajador después de un ERTE, pero deberá respetar el periodo de garantía de empleo, que suele ser de seis meses desde la fecha de reincorporación. Es decir, durante ese periodo, la empresa no podrá despedir al trabajador sin una causa justificada.

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Si la empresa incumple esta normativa y despide a un trabajador dentro del periodo de garantía de empleo, el trabajador tendría derecho a una indemnización. En este sentido, es importante conocer cómo calcular la indemnización tras un ERTE.

Para calcular la indemnización, se tienen en cuenta varios factores, como el salario mensual del trabajador, el número de años trabajados en la empresa y el tipo de contrato. En general, la indemnización suele ser de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades.

Por ejemplo, si un trabajador ha estado en la empresa durante 10 años y su salario mensual es de 1.500 euros, la indemnización sería de 30.000 euros (20 días por año trabajado x 10 años x 1.500 euros de salario mensual / 12 meses).

Es importante destacar que si el despido se produce dentro del periodo de garantía de empleo después de un ERTE, la indemnización se verá aumentada en un 50%. Es decir, en el ejemplo anterior, la indemnización sería de 45.000 euros en lugar de 30.000 euros.

Calcular la indemnización puede ser un proceso complejo, pero es importante conocer los factores que se tienen en cuenta para poder reclamar lo que corresponde.

Todo lo que necesitas saber sobre el ERTE en la empresa: consecuencias y soluciones

El ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) se ha convertido en una medida frecuente en las empresas durante la pandemia. Su objetivo es reducir temporalmente la jornada laboral o suspender los contratos de trabajo debido a causas económicas, técnicas, organizativas o productivas. Pero, ¿qué ocurre después de un ERTE? ¿Se puede despedir a los trabajadores afectados?

La respuesta es sí, pero con ciertas condiciones. Es importante tener en cuenta que el ERTE es una medida temporal y que, una vez finalizado, la empresa puede proceder a despedir a los trabajadores afectados si existen causas justificadas para ello.

Según el Estatuto de los Trabajadores, las causas justificadas para el despido son las siguientes:

  • Despido disciplinario: por faltas graves o muy graves cometidas por el trabajador.
  • Despido objetivo: por causas económicas, técnicas, organizativas o productivas.
  • Despido colectivo: en caso de que la empresa tenga que realizar despidos masivos por causas económicas, técnicas, organizativas o productivas.

En el caso de los trabajadores afectados por un ERTE, la empresa deberá justificar el despido en base a alguna de estas causas. Además, deberá cumplir con los procedimientos y requisitos establecidos por la ley, como la entrega de una carta de despido y el pago de la indemnización correspondiente.

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Es importante destacar que el despido de un trabajador afectado por un ERTE puede ser considerado como improcedente si no se cumplen todos los requisitos legales. En este caso, la empresa deberá readmitir al trabajador o pagarle una indemnización por despido improcedente.

Por eso, es importante que las empresas se informen adecuadamente y tomen las medidas necesarias para evitar posibles conflictos laborales y garantizar el cumplimiento de la normativa vigente.

En conclusión, es importante que las empresas sean conscientes de que pueden despedir a trabajadores después de un ERTE, siempre y cuando justifiquen adecuadamente la decisión y respeten los derechos laborales de los afectados. Sin embargo, antes de tomar esta medida, es recomendable que se agoten todas las alternativas posibles y se tenga en cuenta el impacto que puede tener en la reputación de la empresa y en el bienestar de los trabajadores. En definitiva, la gestión adecuada y responsable de los despidos es esencial para mantener un clima laboral saludable y sostenible a largo plazo.
En resumen, es posible despedir a un trabajador después de un ERTE, siempre y cuando se cumplan las condiciones y requisitos establecidos por la ley. Es importante que las empresas se aseguren de seguir todos los procedimientos legales para evitar posibles litigios y sanciones. Por otro lado, es fundamental que los trabajadores afectados por un ERTE conozcan sus derechos y busquen asesoramiento legal en caso de sentir que sus derechos han sido vulnerados. En definitiva, tanto las empresas como los trabajadores deben actuar con responsabilidad y cumplir con las normativas para garantizar una salida justa y equitativa del ERTE.

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Sara Rodríguez

Grado Economía Universidad Complutense de Madrid

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